Los vecinos deberán sacar dos bolsas, una transparente y otra de color. Habrá días específicos de recolección de residuos húmedos y secos. Se trabaja con los supermercados para reducir la presencia de bolsas plásticas y envases pets. Se exigirá el cesto en altura.
Lía Masjoan
lmasjoan@ellitoral.com
El año que viene, el Ejecutivo municipal pretende avanzar con firmeza con el programa Cambio Verde, implementando la recolección diferenciada de residuos domiciliarios, prohibiendo la entrega de bolsas plásticas en los supermercados y obligando a los vecinos a colocar cestos en altura en las veredas.
Para esto tiene previsto lanzar en la segunda quincena de febrero una campaña publicitaria de difusión y concientización, ya que implicará un gran cambio cultural para la ciudadanía. Recién en marzo los vecinos del microcentro, Candioti, Siete Jefes y Guadalupe -donde se registra la mayor concentración de basura- comenzarían a depositar en bolsas distintas los restos orgánicos de los inorgánicos.
Las empresas recolectoras Cliba y Urbafé deberán rediseñar recorridos, días y horarios, para lo cual ya han mantenido reuniones con el municipio. “La idea es que haya días específicos para retirar las bolsas de color con los restos húmedos y las transparentes con los secos, de modo que pueda visualizarse el material recuperable”, explicó el secretario de Desarrollo Social, Alejandro Boscarol.
Una experiencia similar se lleva adelante desde 2005 a través del programa Santa Fe Recicla, pero con “un nivel bajo de adhesión de los vecinos”. Por eso la idea es generalizar la modalidad por etapas, “incorporar otros barrios de forma gradual, controlar fuertemente el horario en que se saca la basura y multar”, explicó el funcionario.
Con esto el municipio buscará reducir la cantidad de basura que llega al relleno sanitario -250 toneladas por día- y la cantidad que se pierde en el camino de la mano de los recolectores informales. Se estima que unas 50 toneladas terminan en microbasurales barriales.
Volver a la bolsa de los mandados
Al mismo tiempo, se buscan alternativas para disminuir la proliferación de bolsas plásticas en la vía pública. Aunque sobre este punto podría avanzarse con mayor firmeza en 2011, ya se han mantenido reuniones con la Cámara de Supermercadistas y el Centro Comercial. El objetivo es generar los consensos necesarios para prohibir su entrega y promover el uso de otras de mayor tamaño o de la tradicional bolsa de los mandados.
“Desde los supermercados dicen que es factible, en algunos casos las van a vender para propiciar que la gente lleve su bolsa o darán otras más grandes para que entren más productos”, explicó Boscarol.
El proceso implicará un gran cambio de conductas para los santafesinos, pero también la readecuación de varias ordenanzas. “Estamos haciendo un compendio de todas las normas existentes, modificando algunas e incorporando cosas nuevas”, apuntó.
En casa, las familias deberán conservar sus residuos por más tiempo: el camión recolector pasará todos los días, pero algunos retirará lo seco -papel, cartón, pets, etc.- y otros lo húmedo -restos de comida, etc.-.
Para ajustar detalles al programa, se realizó una experiencia piloto con cinco familias de distinto nivel socioeconómico. “Pretendimos ver cuánto tiempo pueden tener la basura en sus casas y ahora estamos definiendo una media y ajustando el cronograma de días y horarios”, dijo el funcionario.
En principio, los cambios no afectarán el contrato con las empresa Cliba y Urbafé y tampoco implicará un ahorro para el municipio. Este servicio se lleva unos 50 millones del presupuesto. “La cantidad de recorridos de los camiones va a hacer la misma pero como la ciudad ha crecido mucho tenemos que incorporar sectores y lo estamos evaluando con las empresas”.
Envases pet
Los envases plásticos son parte del material que más valor tiene en el mercado del reciclado. Paradójicamente, es lo que más se observa en las calles y obstruye los desagües. Para minimizar esto, el municipio afina una idea: “Vamos a trabajar fuertemente con los supermercadistas, capacitando a todos los cajeros”, adelantó Boscarol, de quien depende el área de Ambiente, a cargo de Roberto Celano.
La propuesta apunta a que los supermercados -grandes y chicos- se conviertan en puntos de recolección de plásticos. Para esto se planea incluir promociones y precios diferenciados para los consumidores que lleven sus envases pet cuando compren gaseosas, por ejemplo. Los recipientes de lavandina, aceite y otros productos podrán depositarse en grandes redes dispuestas en estos comercios.
“El secreto para que todo esto funcione es la continuidad de las políticas y de las campañas de difusión para generar conciencia en la población”, finalizó Boscarol.